Sin lugar a dudas ha sido uno de los momentos clave de la Fashion Week parisién Spring Summer 2010, la despedida de Jean Paul Gaultier de la Maison Hermés. Elegancia en estado puro y una oda al universo ecuestre de lujo exquisito.
Sedas fluidas que viajan de los foulards clásicos de la firma a sus pantalones, jumpsuits o leggins de piel que persiguen la figura femenina desde una renovada visión chic del mundo ecuestre o piel de cocodrilo transparente. El mundo Hermes!. Todo el desfile tenia un marcado acento argentino, protagonizado sobretodo por su sombrerería y sus boleros.
Indudablemente, una despedida de la firma tras siete años de exquisitas colecciones, tenía que terminar con una colección dedicada al heritage esencial de la firma, a su horsey style.
Nos gusta esta visión fetichista de la iconografía ecuestre planteada por Gaultier. Es el final de una historia de amor, así que esperaremos a descubrir que nos depara del nuevo amante de Hermés.
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